
Existen múltiples factores que se relacionan con el aumento de la violencia en los jóvenes, algunos de los mas relevantes son:
- Crimen organizado / Narcotráfico
Los cárteles buscan jóvenes para reclutamiento (como sicarios, halcones, transporte, etc.), ya que muchas veces les conviene gente joven puesto que son más fáciles de moldear, con menos vínculos, etc. Además, los conflictos territoriales entre cárteles hacen que haya choques violentos que también afectan zonas con población joven. - Desigualdad social y económica
Pobreza, falta de oportunidades de empleo, marginación en ciertas regiones, falta de acceso a educación, servicios de salud mental, espacios seguros: todo esto aumenta la vulnerabilidad de jóvenes a la violencia o al ser explotados por grupos delictivos. - Entornos familiares y comunitarios inestables
Violencia familiar, abuso, negligencia, disolución de la familia, poco acompañamiento emocional. Estos factores pueden predisponer a que jóvenes adopten conductas de riesgo o sean más susceptibles al reclutamiento delictivo. - Debilidad institucional y corrupción
Cuando la policía, los tribunales o los servicios públicos no funcionan bien, no hay justicia, hay corrupción o impunidad, los jóvenes no ven alternativas legítimas o creen que no se les protege, lo que puede llevar a actuar por mano propia o caer en redes ilegales. - Desensibilización y cultura de la violencia
En algunas zonas la violencia ha sido una constante durante muchos años, lo que lleva a que haya normalización (se ve como algo “habitual”), pérdida de empatía, imitación. También medios de comunicación o redes sociales pueden influir mostrando violencia, lo que puede reforzar ideas de que la violencia es una vía de solución. - Falta de acceso a apoyo psicológico y salud mental
Muchos jóvenes que han vivido traumas, abuso, abandono, discriminación, acompañado de contextos de estrés, crisis económica, pandemia, etc., no tienen recursos o espacios de apoyo, lo que puede intensificar conflictos internos que luego se expresan como violencia - Pandemia y crisis recientes
La COVID-19 alteró muchas cosas: aumentó la pobreza, el aislamiento social, el estrés, las rupturas familiares; esto generó más vulnerabilidad emocional, mental, falta de actividades, lo que puede derivar en agresividad, abandono escolar, etc. Aunque los datos específicos siguen siendo analizados