Las redes sociales están diseñadas para ser adictivas: activan el sistema de recompensa del cerebro donde se libera dopamina, neurotransmisor que se relaciona con actividades que causan placer.
Las dosis de dopamina se pueden conseguir a través de:
- “Likes” o me gusta
- Comentarios positivos en publicaciones
- Publicaciones compartidas
- Interacción con otros usuarios, marcas y más
La adicción a las redes sociales es una adicción conductual, caracterizada por la preocupación extrema de las mismas así como la necesidad compulsiva de usarlas y el individuo pasa mucho tiempo en ellas, afectando negativamente diferentes áreas de su vida.
(Hilliard, 2023)
Esta adicción se verá como la adicción a otras sustancias o conductas:
- Cambios en el estado de ánimo, el comportamiento y la cognición
- Tolerancia: mayor uso de redes sociales con el tiempo
- Síntomas de abstinencia: síntomas físicos y emocionales desagradables cuando se restringe
- Conflictos interpersonales
- Recaídas: estos individuos pueden regresar al uso excesivo de redes sociales después de periodos de abstinencia